Después de una jornada intensa de ejercicio físico, la alimentación juega un papel primordial para recuperar nuestro estado físico. Todos conocemos los beneficios que en este sentido nos aportan las proteínas y los hidratos de carbono, pero hay otras sustancias, vitaminas y minerales, que promueven de una forma directa nuestra recuperación muscular.
En primer lugar, destacamos la vitamina C con su gran poder antioxidante, que neutraliza el efecto del estrés que representa el esfuerzo para nuestro cuerpo, pero además, la vitamina C participa en la formación de colágeno que es necesario para reparar células de la piel, tejidos, tendones, ligamentos y vasos sanguíneos. Por eso, consumir preparaciones ricas en vitamina C es ideal si pretendemos favorecer la recuperación tras un esfuerzo.
Por otra parte, otra vitamina de la que no nos podemos olvidar para facilitar nuestra recuperación muscular es la vitamina E. También posee poder antioxidante, pero lo más importantes es su efecto favorecedor de la circulación sanguínea, que ayuda a limpiar al organismo de productos de desecho que se generan tras un esfuerzo intenso y, al mismo tiempo, favorecen la llegada de nutrientes y oxígeno a los músculos lo cual promueve la recuperación.
Y por ultimo, el magnesio, que favorece la reparación muscular y evita la tensión muscular, los calambres y espasmos musculares.
Alimentos en los que podemos encontrar estos tres micronutrientes son: espinacas, piñones, brócoli, pipas de girasol, lentejas, zumo de limón, semillas de calabaza, zumo de naranja, ensalada de tomate, aceite de oliva y aguacate, entre otros.
En primer lugar, destacamos la vitamina C con su gran poder antioxidante, que neutraliza el efecto del estrés que representa el esfuerzo para nuestro cuerpo, pero además, la vitamina C participa en la formación de colágeno que es necesario para reparar células de la piel, tejidos, tendones, ligamentos y vasos sanguíneos. Por eso, consumir preparaciones ricas en vitamina C es ideal si pretendemos favorecer la recuperación tras un esfuerzo.
Por otra parte, otra vitamina de la que no nos podemos olvidar para facilitar nuestra recuperación muscular es la vitamina E. También posee poder antioxidante, pero lo más importantes es su efecto favorecedor de la circulación sanguínea, que ayuda a limpiar al organismo de productos de desecho que se generan tras un esfuerzo intenso y, al mismo tiempo, favorecen la llegada de nutrientes y oxígeno a los músculos lo cual promueve la recuperación.
Y por ultimo, el magnesio, que favorece la reparación muscular y evita la tensión muscular, los calambres y espasmos musculares.
Alimentos en los que podemos encontrar estos tres micronutrientes son: espinacas, piñones, brócoli, pipas de girasol, lentejas, zumo de limón, semillas de calabaza, zumo de naranja, ensalada de tomate, aceite de oliva y aguacate, entre otros.
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