Quiero dedicar este artículo a MAGDALENA BARRERA. Se trata de una compañera de trabajo y vecina de toda la vida. su vida ha pasado por unos trances que pocas personas humanas lograrían salir con la entereza que está saliendo ella. Si bien es mi deseo éste de hacer un reconocimiento a esta persona no es sino por lo que trasmite a la vida. Todas las personas humanas debemos aprender de ella cómo debe afrontarse los azotes a los que te puede someter a veces la vida y sobre todo con el reconocimiento de la realidad, la entereza y el buen humor que hacen de ella una persona íntegra y transmisora de los valores humanos.
Su lucha incansable y su tesón me hacen recordar muchas veces a deportistas que han conseguido premios importantes no sólo por eso mismo, los premios conseguidos sino por lo que representan como deportistas para la sociedad. Así, a RAÚL GONZÁLEZ a sus 32 años de edad, con todos los títulos consguidos, sigue luchando cada día por superarse y ser mejor deportista; como nuestro RAFA NADAL, que fue nombrado premio Príncipe de Asturias por representar inequívocamente todos los valores del deporte como ejemplo para todos los jóvenes y la sociedad en general.
Pues, tú, MAGDALENA, representas todos estos valores y nos enseñas todos los días cómo hay que enfrentarse a la vida. No nos dejes nunca de seguir enseñando cómo se lucha cada vez que vuelve a amanecer.
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