Siempre fue motivo de felicidad en casa que llegara el 6 de diciembre a nuestro calendario. Es el cumpleaños de mi mujer y ya tengo una aliada en mi pequeña Sofía para que me dé ideas de qué regalarle y cómo hacer más especial este día. Felicidades, que sean muchos más.
Igualmente, esta fecha es señalada por ser el Día de la Constitución, con más inri este año que se cumple su 40º aniversario.
Aún recuerdo cuánto se celebraba cuando yo iba al colegio. Días antes preparábamos, murales en la pared confeccionados con pinceles, témperas...también hacíamos redacciones y hasta alguna representación conmemorativa para que fuera una gran fiesta, todo por ensalzar a nuestra Carta Magna. Hoy día en las aulas?, bueno, un poquito de pasada para "tener contentos a todos".
Este documento por el que en España se puso fin a una dictadura y entrábamos en un nuevo tiempo; un tiempo de libertad, de progreso y de convivencia en el respeto entre todos los pensamientos e ideologías.
Ni que decir tiene que un texto promulgado en 1978 necesita ser reformado en algunos puntos 40 años después. Es trabajo de la política encontrar los consensos oportunos y los mecanismos para ejecutarlo. Lo que sí estoy rotundamente en desacuerdo es en que se convierta en blanco para intentar su desobediencia y derribo. Qué poca memoria. Así, la convivencia entre todos está en peligro desde muchos flancos. Quiero apelar a la buena preparación de la gente joven (próxima generación de sociedad) para que le dé el valor que merece si queremos que nuestra democracia perdure muchos años.
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