De todos es conocida mi afición al deporte en general y al fútbol en particular. Hace muchos años me propuse estudiarlo en toda su profundidad, llegar hasta su esencia. Durante este tránsito me estoy encontrando, al igual que ocurre con el estudio del Universo, una materia infinita y en continua expansión. Métodos de entrenamiento, preparación de la competición, tratamiento con los futbolistas...así como la diversificación de todas estas materias entre un ideal de grupo de trabajo cada vez más complejo.
Hace no muchos años, los clásicos sólo veían en un equipo técnico a un entrenador y un preparador físico. El entrenador, para tener una consideración externa, debía tener perfil autoritario y el preparador físico tenía como objetivo modelar atletas. Gracias a Dios, el avance de lo que debe ser un trabajo de conjunto se los merendó. Posteriormente aparecieron otras figuras, primero denostadas y ninguneadas, y hoy día imprescindibles. Los entrenadores se preocuparon de adaptarse a los tiempos reciclándose continuamente, los preparadores físicos hicieron lo mismo basando su trabajo sobre especificidades del fútbol, irrumpieron los psicólog@s deportivos, recuperadores, analistas (estudio equipos rivales, vídeos) y el coach deportivo.
Orgulloso estoy de haber trabajado con muchos de ellos pero me queda la espinita de no haberlo hecho aun con todos a la vez, todo se andará.
Esta temporada, aunque haya finalizado prematuramente para mi, he tenido la dicha de contar con un grupo de trabajo formado por 2º entrenador, entrenador de porteros, psicóloga y delegado. Es decir, aunque se tratara de un club modesto, si quieres contar con ellos se puede hacer. No estoy en el fútbol para ganar dinero y sí para tener unas condiciones de trabajo óptimas que redunden, por supuesto, en la obtención del máximo rendimiento.
La próxima temporada quiero volver a entrenar y haré todo lo posible para ello. Si saliera un proyecto bonito ahí estaré pero con mi gente, mi grupo de trabajo. Mientras, no voy a perder ni un sólo minuto en no prepararme más. En este sentido, si bien pude asistir a varios cursos de coaching deportivo, es en este momento cuando me ha llegado la oportunidad de investigar profundamente acerca de esta figura y su vinculación primordial YA en el mundo del fútbol.
Y qué mejor que adentrarme en la misma de la mano de quien además de ser un gran amigo desde hace muchos años, un excelente director de banco, un gran entrenador, estupendo conocedor del fútbol y un experto en coaching, hablo de Juanma Suárez.
Él ha sido quien ha confiado en mi para el magno proyecto que tiene entre manos y que muy pronto verá la luz. Mi cometido estará en aportar mi granito de arena para que todos aquellos ávid@s que busquen algo más de las variantes futbolísticas en su conjunto teniendo como base factores del coaching deportivo tengan respuesta y alguna que otra herramienta más para aplicarla en sus equipos y grupos de trabajo.
Seguro, será una experiencia apasionante y un pasito más por mi parte.
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