Imagen imponente del Señor del Gran Poder proyectada en una sombra. Momento del Vía Crucis
Si hay infinitas cosas por las que me gusta la Semana Santa, ésta que se aprecia puede ser la infinita más uno. Compartir momentos de amistad en una "noche de guardia" cada Viernes de Dolores ante nuestro Cristo y nuestra Virgen, representa una inyección de unión y complicidad que no debemos perder nunca (faltó Javi que estaba enfermo).
Es necesario guardar en la memoria estos momentos para apreciar realmente el valor de tantos sentimientos acumulados y que son, sin duda, el motor para que perdure en el tiempo nuestras tradiciones.
Desde su nacimiento, esta cofradía ha representado todo tipo de parabienes en nuestro pueblo. Alegría, luz, olores, bullicio...Desde este Domingo de Ramos, valiente.
En Semana Santa, Sevilla siempre te llama. Nosotros no hemos querido desatender y ahí estábamos. Todo esto es para vivirlo.
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