El caso de Abidal es algo único, no sólo en el fútbol sino en el deporte en general. Incluso juntando todos los elogios posibles nos quedaríamos cortos ante la gesta de este gran deportista, y, creo, ejemplo de superación para futuras generaciones de deportistas.
A tenor del testimonio de los médicos que le han atendido en la superación de su dañino cáncer hepático, de sus compañeros y de sus familiares más cercanos, todos quedan gratamente sorprendidos y en algunos casos estupefactos ante la extraodinaria fortaleza para combatir el dolor, la extrema adversidad en la que ha estado sumido así como la capacidad de adptación para volver a competir al máximo nivel.
Sirva pues este post para que el resto de mortales y en particular los más jóvenes, tomemos el EJEMPLO ABIDAL la mejor de las formas posibles de lucha, superación y triunfo desde lo más adverso. Bravo Abidal, la gesta que has conseguido pervivirá como una gran hazaña del deporte y de la vida muchos, muchos años.
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