miércoles, 28 de septiembre de 2011

LA VIDA DE UN FUTBOLISTA

Me quiero parar en este artículo para analizar los entresijos de la vida de un futbolista profesional como también por extensión la de cualquier entrenador de fútbol. Estamos hablando de unos personajes en la sociedad que están supervalorados, y no sólo desde el punto de vista económico con cantidades archimillonarias sino a nivel mediático. Hoy día cualquier jugador, a pesar de tener corta edad, que despunte por tener el atributo de una habilidad superlativa para jugar a ésto, enseguida consigue un contrato millonario siendo vitoreado y aclamado por masas además que se convierte en un icono y una fuente inagotable de generar dinero. Ya todos queremos una foto con él, un autógrafo, una entrevista.....


Pero también hay una cara oculta de estos personajes. Como digo, a corta edad ya tienen que salir de casa para adaptarse a lugares alejados de su familia, viven sacrificadamente en cuanto a su alimentación, no pueden completar unos estudios que les ayude a curtirse, la cantidad de partidos que han de jugar les somete a un agobio psicológico además que se llevan toda su vida deportiva de avión en avión, por no hablar de la mella que deja en su cuerpo la cantidad de lesiones que se producen diariamente en su profesión de futbolistas; todo lo cuál conlleva a un gran desgaste. A los 10 años de profesional, por poner una fecha, el futbolista está "quemado" de esta vida. Algunos se habrán hecho millonarios y otros, en cambio, no tendrán para seguir viviendo.


Eso sí, entre las dos márgenes del río, en cuanto a circunstancias que vive el futbolista profesional que acabo de enumerar, hay un aspecto que sí me choca un poco de aquí de España y que pienso que podríamos mejorar (aunque ya algunos equipos están imitando modelos europeos). En Italia, Francia e Inglaterra, al menos que a mi me conste, los entrenamientos de los futbolistas tienen un carácter de jornada laboral. Van a la Ciudad Deportiva desde por la mañana, entrenan, realizan allí el almuerzo, se echan la siesta y vuelven a entrenar por la tarde. Eso sí, los clubes deberían estar en vanguardia en cuanto a instalaciones (residencia de futbolistas, consultas médicas y de fisioterapia, comedores, salas de video y televisión...) para que puedan realizar todo ésto. Evidentemente no todos los jugadores ni a todas horas estarían entrenando, algunos estarían recuperándose de lesiones, otros realizando entrenamientos personalizados (también por grupos) de algún aspecto futbolístico concreto....Serían materias, todas ellas englobadas en el término "sesión de entrenamiento" imprescindible para el futbolista moderno y muy alejado de lo que se concibe en España. Aquí, la normalidad es entrenar de 10 a 12 y a casa, excepto en aquellos clubes (muy pocos) donde se pueden permitir el lujo de tener en sus instalaciones, dotadas a tal efecto, para los futbolistas.


En definitiva, la opinión pública sólo ve todo lo bueno que le ocurre al jugador en su profesión de futbolista pero hay que ser comprensible también con el esfuerxo que realizan para generar espectáculo y que nosotros lo disfrutemos sentados en el sillón.

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