viernes, 14 de septiembre de 2012

EL FÚTBOL AL SERVICIO DE LOS MÁS DESFAVORECIDOS


El fútbol, como elemento integrador y fenómeno de masas siempre ha de estar al servicio de la sociedad y en particular de los más débiles y desfavorecidos. La Fundación Kanouté y este futbolista en particular, siempre sensible con este tipo de causas, nuevamente se presta a recaudar fondos para luchar con la desnutrición severa de los niñ@s de su país. Será pues la V edición del partido Champions for Africa, que tendrá lugar el próximo día 25 de septiembre en el Estadio Sanchez Pizjuán, UNICEF España y la Fundación Kanouté lanzan una cadena virtual de SMS que pretende unir Sevilla y Malí contra la desnutrición infantil. Cada mensaje se irá sumando hasta cubrir los eslabones de la cadena necesarios para recorrer la distancia que separa Sevilla, ciudad que acoge la edición del V Champions for Africa, y Malí, país dónde la Fundación Kanouté ha construido la Ciudad de los Niños de Sakina, al que se destinan parte de los fondos conseguidos.
Las personas que quieran participar en esta cadena solidaria de Champions for Africa pueden enviar un SMS con la palabra UNICEF al 28028 y comprobar sobre un mapa virtual su posición en la cadena. Estos mensajes permitirán salvar las vidas de miles de niños y ampliar las instalaciones de la Ciudad de los Niños, ya que el coste de cada SMS será donado íntegramente a UNICEF. Con esta cantidad, 1,20€* (sin impuestos incluidos) UNICEF puede proporcionar un día de tratamiento para un niño con desnutrición aguda.
Este partido también servirá para homenajear al mejor jugador de la historia moderna del Sevilla FC, Frédéric Kanouté, un ejemplo, por sus valores, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Se trata, por tanto, de un acontecimiento único e irrepetible, en el que tiene que jugar toda la ciudad de Sevilla, porque el objetivo no es otro que meterle un golazo a la desnutrición infantil.

Yo, ya he colaborado con un eslabón de la gran cadena que se busca. ¡Venga!, anímate y prestemos nuestra ayuda, siempre hay gente mucho peor que nosotros.

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