A veces en la vida hay que tomar decisiones difíciles, impopulares, no comprendidas....pero en el día de ayer no fue el caso. A pesar de verse truncadas las ilusiones de mucha gente que durante todo el año esperábamos estas benditas horas, nunca una decisión fue más responsable y más correcta. El Jueves Santo se presentó con un cariz poco visto para los que llevamos en las espaldas muchos de ellos. Ya lo vaticinaban las cabañuelas durante mucho tiempo atrás pero a todos nos quedaba un resquicio de esperanza al que nos queríamos abrazar pero cuando Dios no quiere Santos no pueden. Comenzó el Jueves Santo como cada año, aunque éste con la peculiaridad de los malos presagios climatológicos confirmados posteriormente. Este año no hemos salido a la calle. El tiempo no nos ha dejado de cumplir nuestros sueños pero hay un patrimonio intangible que no se ha dañado y no es otro que nuestra familia costalera. Muy mal lo pasamos ayer cuando todos preveíamos que no había solución. Cualquier decisión que se hubiera tomado de salir hubiese sido equivocada. Dieron para mucho las casi más de dos horas que duró la espera. Hubo de todo, especulaciones, señalamientos, miradas, incertidumbre, emoción contenida, impaciencia, esperanza. Hasta que, a eso de las 21'30 h. se anunció lo que se preveía, no saldríamos este año. En ese momento se sucedieron las saetas de dos monstruos del género que desde hace más de 10 años acuden a nuestro pueblo como profesores inigualables de este cante como son Manuel Cuevas y Kiki de Castilblanco y que en vano queda cualquier interés en parecérsele. El paso del Cristo se levantó para decir a toda la gente cuál es la cuadrilla que mejor anda en este pueblo. El paso de palio también hizo mover sus bambalinas en dos chicotás para quitarse el mal sabor de boca. Todo era raro. Finalmente acudimos al Salón de Actos para tomar los preceptivos aperitivos después de la cofradía pero hasta esos momentos tuvieron tientes de resignación por lo que pudo ser y no fue. Atrás quedaron muchas horas de ensayos, de conviencia, familiaridad y amistad de un grupo de costaleros que siempre estará ahí. Gracias compañeros por saber estar cuando está el paso arriba, cuando hay que meter riñones y cuando, como ayer, la cosas no vienen de cara. Ya sólo nos queda esperar un año para volver bajo las trabajaderas, nuestro hábitat natural, y donde manifestamos en silencio y en la oscuridad todos los valores cofrades inquebrantables y perennes en el tiempo.
viernes, 22 de abril de 2011
DECISIÓN CORRECTA Y RESPONSABLE
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1 comentario:
Mi mejor enhorabuena, a la tertulia cofrade, a la Hermandad de la Sangre y como no, a sus maravillosos jóvenes costaleros.
Mis mejores deseos para todos, ahora y siempre..
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