
Echado el cierre en la mayoría de las piscinas y con la estampida general en nuestras playas, llega el otoño cargado de un buen número de actividades y obligándonos a cambiar de escenario: dejamos las playas, para sumergirnos en paisajes iguales de atractivos con el inconfundible sonido que provoca nuestro paso sobre las hojas secas. Empecemos por el senderismo, con las temperaturas más bajas a nuestro favor, es una actividad ideal para esta época del año que combina varios elementos en un solo día. Por ejemplo, la quema de calorías derivada de la caminata, al mismo tiempo que disfrutamos de todo un entorno natural. Investigad la multitud de rutas que posee nuestra comunidad y aprovechad para salir con la familia o amigos. Pero ten en cuenta algo muy importante: hacerse con un buen equipamiento (vigilad pies y tobillos) y nunca salirse del tramo señalizado, para evitar que nos perdamos en cualquier medio natural. Otras actividades que podemos desarrollar con este descenso en las temperaturas es la bicicleta, en cualquier momento del día y en cualquier sitio, sólo o acompañado. Y recuerda que, como la sugerencia anterior, no descuides tu equipamiento y elementos de seguridad. Correr e incluso patinaje o monopatín, aprovechando los numerosos circuitos con los que cuenta muchos parques en nuestras ciudades.
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