A punto de dar por finalizado 2015 me dispongo a hacer, en este, mi espacio personal, un breve resumen de lo que ha sido un año de mucha incertidumbre.
No es mi intención hacer el mensaje de Navidad del Rey ni el Urbi et Orbi del Papa, sólo unas breves reseñas de lo que han suscitado para mi 365 días, 5 horas, 48 minutos y 46 segundos que habrá tenido 2015 (por eso 2016 será bisiesto).
Puede ser que haya sido el año más inestable y que más me haya hecho pensar cada día que terminaba.
Sigo dando gracias a la vida por la gente que me ha tocado en suerte que estén cerca de mi, mi familia, mis amigos...
Cada vez, el exterior está más difícil para afrontarlo, cada vez está más valorada la mediocridad merced a la incomodidad que supone currarse ser diferente, cada vez vende más y encuentra más oportunidades ser un pelota, hipócrita, grosero, incluso un h.p. Cada vez, incomprensiblemente, se quiere poner a la misma altura el jamón de bellota con el de máquina, pero, no, no es lo mismo aunque alguna corriente orquestada pretenda cegar la realidad. Lo legítimo lo es por naturaleza, por ADN y lo otro es forzado y tiene corta vida aunque vivida con alfombra roja ficticia.
Es cierto que el tiempo ha pasado para mi y no he llegado a completar algunos proyectos que tenía previstos pero no es menos cierto que mi lucha da para perseguir otros tantos.
Soy muy autocrítico y seguro que me habré equivocado más que acertado pero mi contrato con la perseverancia y el inconformismo es de por vida.
Tengo previsto para 2016 luchar y defender a los míos y mis ideas, tanto del fútbol, de las relaciones humanas y de la vida en general, que bastante he invertido toda mi vida en cultivarlas, de lo demás no sé cómo va a ir, todo está en el aire. Intentaré estar lo más preparado posible para las oportunidades que puedan presentarse.
Adelante, pase usted, señor 2016. Salud, trabajo y éxitos para tod@s.
Puede ser que haya sido el año más inestable y que más me haya hecho pensar cada día que terminaba.
Sigo dando gracias a la vida por la gente que me ha tocado en suerte que estén cerca de mi, mi familia, mis amigos...
Cada vez, el exterior está más difícil para afrontarlo, cada vez está más valorada la mediocridad merced a la incomodidad que supone currarse ser diferente, cada vez vende más y encuentra más oportunidades ser un pelota, hipócrita, grosero, incluso un h.p. Cada vez, incomprensiblemente, se quiere poner a la misma altura el jamón de bellota con el de máquina, pero, no, no es lo mismo aunque alguna corriente orquestada pretenda cegar la realidad. Lo legítimo lo es por naturaleza, por ADN y lo otro es forzado y tiene corta vida aunque vivida con alfombra roja ficticia.
Es cierto que el tiempo ha pasado para mi y no he llegado a completar algunos proyectos que tenía previstos pero no es menos cierto que mi lucha da para perseguir otros tantos.
Soy muy autocrítico y seguro que me habré equivocado más que acertado pero mi contrato con la perseverancia y el inconformismo es de por vida.
Tengo previsto para 2016 luchar y defender a los míos y mis ideas, tanto del fútbol, de las relaciones humanas y de la vida en general, que bastante he invertido toda mi vida en cultivarlas, de lo demás no sé cómo va a ir, todo está en el aire. Intentaré estar lo más preparado posible para las oportunidades que puedan presentarse.
Adelante, pase usted, señor 2016. Salud, trabajo y éxitos para tod@s.
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