Hace ya varios años nació una idea y de esta idea un proyecto, un magnoproyecto. Aspire Academy Football. Como no, el ideólogo de todo ésto debía ser un español, Josep Colomer. De este hombre que por aquellos entonces trabajaba en la cantera del Barcelona cuando le conocí, aprendí en un día un montón de claves para el entrenamiento de los chicos de formación. Fue en el Estadio Olímpico, creo que en 2002 cuando en unas solas horas y a partir de un trabajo práctico sobre el campo hizo que un buen chorro de alumnos de fútbol comprobásemos los fácil que debíamos enseñar fútbol a l@s chavales.
Él interpretaba que el pase era la base de este juego (también lo creo firmemente) y que éste debía buscarse teniendo la concepción expresa de que el balón buscase traspasar la línea imaginaria formada por dos rivales (algo que muchos puedan pensar como perogrullo, no suele conceptualizarse convenientemente).
Igualmente nos enseñó la mecánica de aprendizaje de los pequeñ@s del golpeo con pierna no dominante (bien vale que fuese utilizada por jugadores más mayores, incluso de primer nivel) y que en pocas horas se encontraba la coordinación y equilibrio para golpear correctamente con ambas piernas. Y por mucho que quieran otros apuntarse el tanto, fue él quien descubrió a Messi de muy, muy pequeñito. Es de la gente de fútbol que en la sombra, sabe muchísimo más, que los que tenemos hasta en la sopa.
Todo un ideista este hombre por eso no me extraña que lo buscase el emir de Qatar Jalifa Al Thani para comandar algo tan monstruoso como Aspire.
Con las miras del Mundial 2022 cuya sede será este emirato, este proyecto se sustenta en formar una gran selección para esta cita además de enseñar al mundo como un proyecto bien diseñado y utilizando los mejores enseñantes actualmente, los entrenadores españoles, puede convertirse en toda una referencia mundial.
Además de en Qatar, también se reclutan chicos de entre 6 y 18 años en otros 15 paises y cuentan con una delegación internacional en Senegal. Otros dos entrenadores españoles, Iván Bravo y Roberto Olabe forman parte también de este equipo de trabajo.
Todo un excepcional proyecto, eso sí, amparado por una gran inversión, pero con una gran idea como sustento que muestra a las claras que tanto en el fútbol como en todos los órdenes de la vida todo parte de una idea de una persona competente y erudita en la materia y cómo no, de la confianza absoluta para sustentarlo de una inversión en unas instalaciones, material y capital humano adecuados. Así se hacen las cosas. Enhorabuena a Josep y al emir porque las ideas siempre son la base del éxito.
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