No tiene precio ni resulta de mayor satisfacción salir al campo para jugar un partido en estas categorías y encontrarse la grada repleta de público. Ni incluso la hora del partido (el partido ha finalizado a las 23'30 de este viernes) ha sido inconveniente para que nuevamente el público estuviera expectante para ver qué ofrecíamos esta vez. Y digo esta vez porque hasta el momento estamos siendo muy irregulares en este comienzo de competición (4 derrotas y 3 victorias) que no en nuestros objetivos, nuestros procedimientos ni en nuestra manera interna de funcionar.
Por supuesto que son importantes para nosotros los resultados y fundamentales para nuestro devenir en la clasificación pero ahora nuestra obsesión y obcecación gira en torno a consolidar una forma de jugar que hasta ahora está siendo por momentos, en algunos partidos, perdida y sin rumbo y en otros resulta tan espectacular que me digo a mí mismo "ésto es lo que quiero que seamos".
Entiendo a mis jugadores y a nuestra afición cuando en días de derrota tengan dudas y se encuentren afligidos por no encontrar correlación entre el esfuerzo invertido y resultado cosechado. También les entiendo, porque es de humanos, que se muestren eufóricos y extasiados cuando hemos obtenido estas 3 contundentes victorias. Aún así, ni las unas ni las otras, ni producen ni deben producir en mi mas que una postura prudente y mesurada basada en la tranquilidad, el análisis continuo, la exigencia en el proceder, la claridad de un camino, la autoconfianza y en la de un grupo de jóvenes jugadores que no dejan de dar muestras en cada sesión de entrenamiento de inconformismo en la búsqueda de saber adónde nos lleva este camino.
Este partido ante el Villaverde, ante varios cientos de espectadores, ha vuelto a ser un gran examen para nosotros.
La 1ª parte ha sido un alegato a nuestras dudas. Hemos puesto demasiado corazón e ímpetu y escasa inteligencia futbolística. Éramos muy largos, precipitados y ansiosos. Ellos se han beneficiado de este intercambio de golpes y en una de las incursiones de sus correosos delanteros que con su velocidad punta han superado nuestra linea defensiva para "matarnos" en una de sus embestidas (0-1 al densanso).
En la 2ª parte no hemos tenido dudas; hemos jugado a lo que proponemos y hemos marcado 5 goles como consecuencia de intercambiar el juego rápido con el pausado y bien dominado, todo desde un rigor defensivo y una anarquía controlada en los metros finales; hemos sido un buen equipo de fútbol.
Me siento muy feliz por algo distinto a lo que todos los míos se sienten. Ellos lo están por este resultado y yo por mi obligación de tomar el camino que en su día elegí para llegar a estos resultados. Enhorabuena equipo, seguid esta senda y auque sabemos que la liga será larga y los partidos dificilísimos, es crucial consolidar este rumbo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario