En muchos lugares del mundo se celebran los carnavales y en cada uno de ellos aflora una idiosincrasia genuina, todas ellas con el afán de dar rienda suelta a la diversión y a la fiesta. Que el carnaval de Cádiz es peculiar nadie lo duda pero cada año me sorprendo más del derroche de creatividad y arte que encierra el Gran Teatro Falla. Cuartetos, comparsas, chirigotas y coros son una fuente inagotable de arte en todos los sentidos. Qué magníficas ideas, qué letristas, cómo cantan e interpretan,....qué arte más grande. Es imposible no apreciar el valor de todas las composiciones, la originalidad que manifiestan y la alegría desatada que le dan su gran fiesta que es el Carnaval. Viva Cádiz.
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