Las acelgas tienen fama de verduras aburridas, pero son todo lo contrario: un excelente fichaje para nuestro organismo, y un polivalente recurso saludable.
La acelga es una verdura con exceso de betacaroteno muy beneficioso para el organismo ya que produce la vitamina A por medio del hígado y el intestino delgado. Ayuda a prevenir todo tipo de cáncer, enfermedades respiratorias, protege el sistema inmunológico y la piel.
La vitamina A que las acelgas contienen, ayuda a mantener en perfecto estado la visión, la piel, el cabello, las mucosas, los huesos y para el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Además, cuenta con propiedades antioxidantes.
También participa en la elaboración de enzimas en el hígado y de hormonas sexuales y suprarrenales. Sus pequeñas cantidades de proteínas y grasas la hacen muy saludable y poco energética, contrario a la espinaca, por lo que debe de acompañarse siempre en platillos fuertes.
La acelga al contener pequeñas cantidades de Vitamina C ayuda al aparato espiratorio y protege contra alergias, sus folatos intervienen en la producción de glóbulos rojos previniendo la anemia y leucemia.
Los minerales que esta verdura contienen son: el magnesio componente de enzimas, el sodio para el volumen sanguíneo, yodo para el adecuado funcionamiento hormonal, hierro para el adecuado funcionamiento del metabolismo, calcio para dientes y huesos y el potasio para la transmisión y generación del impulso nervioso y para la actividad muscular normal.
Como se puede apreciar, la acelga es una verdura bastante nutritiva que puede cocinarse en spaghetti, ensaladas y guisados para una mejor combinación de su fuerte sabor, de preferencia, deberá elegirse la hoja bastante verde y abundante, además de no dejarla cocer mucho ya que perderá sus propiedades nutritivas. Agrega unas hojas de acelga en tu dieta diaria para una mejor alimentación.
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