Víctor Hugo nació tal día como hoy, pero del año 1802 en Francia y falleció en 1885, siendo enterrado en el célebre Panteón de París, lugar reservado a ilustres personalidades francesas. Fue un poeta, novelista y dramaturgo francés, figura clave del movimiento del romanticismo en el país galo. Contribuyó a una profunda renovación lírica y teatral de la literatura de la época y marcó el camino para las sucesivas generaciones de escritores por su claro compromiso político y social. Fue un autor muy popular, de gran éxito. De su pluma salieron títulos tan conocidos por todos vosotros como Nuestra Señora de París (Notre-Dame de Paris, 1831), novela protagonizada por Esmeralda, una gitana, y Quasimodo, un jorobado sordo, en el París del siglo XV. Fue también el autor de Los miserables (1862), su obra más extensa y famosa, y que describe rigurosamente, al tiempo que condena, la injusticia social de la Francia del siglo XIX. Víctor Hugo también desarrolló una actividad política importante (fue desterrado de Francia durante el Segundo Imperio por sus ideas republicanas). Fue elegido para la Asamblea Nacional y más tarde para el Senado. En esta línea, es autor de varios discursos políticos bastante destacables sobre la pena de muerte, la educación o la idea sobre unos Estados Unidos europeos. Las obras de Víctor Hugo marcaron un decisivo hito en el gusto poético y retórico de las jóvenes generaciones de escritores franceses, y todavía es considerado como uno de los poetas más importantes de este país.
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