Sería muy fácil para mi caer en la trampa de los perdedores al poner excusas tan flagrantes como que acometíamos la preparación y disputa de este partido sin cinco de los jugadores que han copado casi todos los minutos competitivos en los 6 partidos anteriores, que no titulares (no me gusta nada esa palabra para catalogar a los jugadores de mis equipos, los titulares son para los periódicos y los telediarios); pero no lo haré porque nuestro oponente nos ha superado claramente.
Sea como fuere, este partido lo hemos perdido porque Gines ha hecho más merecimiento, ha desempeñado mejor las tareas competitivas y ha estado más acertado en todo momento que nosotros.
El 0-3 que nos endosaron en pocos minutos nos ha hecho mucho daño para nuestras aspiraciones en este partido. Aún así, hemos podido, con unos buenos últimos 15' de la 1ª parte, obtener mayor rédito al desaprovechar alguna ocasión clara, con todo, nos marchamos al descanso con 1-3.
Esos momentos de descanso nos ha servido para reestructurar todo nuestro funcionamiento para buscar un revulsivo; hemos hablado, tácticamente nos hemos posicionado de un modo distinto y, conjuntamente, hemos estudiado las claves de lo que habíamos de hacer para voltear el marcador.
Pero el plan nos ha salido mal, prácticamente no hemos tenido más ventaja que en nuestro propio ímpetu y entrega aunque hemos pasado el examen del coraje y el orgullo con nota. Mi equipo se ha vaciado en el campo luchando convencidos por una idea de cómo hacerlo. Aún perdiendo por una clara desventaja (1-4), ha sido emotivo ver a unos jugadores peleando cada acción.
Hasta ahora el fútbol está siendo muy justo con nosotros, nos ha premiado con victorias cuando el desempeño ha sido casi perfecto por nuestra parte, igual que ahora nos está castigando duramente cuando en estos últimos 2 partidos no hemos sido diligentes, desde el punto de vista competitivo, en las tareas que son necesarias mostrar en el campo para optar a ganar los 3 puntos cada partido.
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